Stunt en el conurbano: una actividad que crece y busca ser regulada

Sunt en el conurbano
Sunt en el conurbano

Las caravanas de motos y la práctica del Stunt comienzan a hacerse cada vez más frecuentes en el país, pero especialmente en el conurbano bonaerense, llegando a contar con miles de jóvenes y adultos que, a pesar de los prejuicios que padecen por una parte de la sociedad, entienden que necesitan un espacio propio para poder desarrollar su pasión.

Desde hace algunos años, esta disciplina comenzó a llegar a Argentina desde Brasil, uno de los países en donde el Stunt (truco, en inglés) es furor. En Buenos Aires, diferentes grupos de motociclistas iniciaron el camino para que esta actividad deportiva y recreativa consiga la aceptación de las autoridades pero sobre todo de la sociedad, que todavía los ve con recelo.

El Stunt consiste en practicar cualquier tipo de trucos y acrobacias con una moto o bicicleta, siempre y cuando el rodado esté apoyado en el suelo en una sola rueda. La habilidad y pericia del conductor es festejada por los espectadores y compañeros que los observan. 

En la zona sur, uno de sus máximos exponentes es Gonzalo Origuela, un joven de 23 años apasionado de las motos que desde hace un tiempo no solo viene organizando este tipo de eventos, sino que también busca que la municipalidad y/o la provincia les brinde lugares cerrados y propicios para poder realizar estos encuentros sin perjudicar ni molestar al resto de los vecinos.

Un lugar seguro para el Stunt

Secciones de este artículo

«Nuestro objetivo es poder contar con un lugar en donde poder realizar este deporte sin perjudicar a los vecinos», cuenta Origuela a Periódico El Progreso. «Pregonamos esta actividad de manera inclusiva, porque a nuestras caravanas de motos vienen muchas familias, algunas con sus hijitos, a disfrutar y mirar, pero también a participar de cada encuentro con su moto, a pasarla bien», explica. 

«Lo que tratamos de inculcar siempre es la seguridad. En nuestro caso somos muy estrictos con el uso del casco y con respetar las velocidades máximas, hacemos mucho hincapié en eso, así como también en no consumir alcohol, y por suerte la gente lo va entendiendo», explica Origuela, quien recuerda con dolor la muerte de su amigo Lautaro Coronel, El Noba, quien falleció tras un grave accidente con su moto por no utilizar casco. «Después de su muerte nos pegaron mucho en todos lados, pero justamente por eso somos estrictos en las medidas de seguridad, queremos que se vea todo lo lindo que genera el Stunt y que se puede hacer de forma segura».

El Stunt, un movimiento en auge en el conurbano bonaerense
El Stunt, un movimiento en auge en el conurbano bonaerense

Origuela nos cuenta también acerca de DominGrau, un local ubicado Mosconi 2268, Quilmes Oeste, con su correspondiente habilitación, en donde además de trabajar sobre las motos, una psicóloga (que integra el grupo de motociclistas) brinda ayuda y asesoramiento totalmente gratuito a toda persona que lo necesite. Además, recientemente incorporaron clases de boxeo a cargo de una profesora, los días martes y jueves. “La idea es que los chicos puedan hacer una actividad deportiva y recreativa por fuera de las motos y las bicis”, explica.

Muchos chicos se suman con sus bicis al movimiento Stunt
Muchos chicos se suman con sus bicis al movimiento Stunt

Regular las caravanas de moto 

Volviendo a las caravanas, Gonzalo cuenta que “Son cada vez más numerosas, viene gente de Varela, Quilmes, Berazategui, y tratamos de hacerlas después de la medianoche para no perjudicar a los vecinos con el tránsito», y explica además que «viene gente de toda clase social: pibes que estudian o que trabajan en una fábrica o un quiosco, médicos, policías, oficinistas, todos con la misma idea de compartir nuestra pasión por las motos. Es un movimiento inclusivo, sobre todo con las mujeres, que son muchísimas, y con los más chicos, quienes practican Stunt con sus bicicletas». También hace énfasis en que “muchos pibes y pibas han salido de una adicción y han encontrado en el stunt y en nuestras caravanas un lugar de pertenencia, un lugar donde pueden compartir y tener algo propio”.

Stunt en el conurbano: una actividad que crece y busca ser regulada
Stunt en el conurbano: una actividad que crece y busca ser regulada

Actualmente son muy pocos los distritos bonaerenses donde esta actividad cuenta con un lugar formal, seguro y alejado de los centros urbanos para que sus fanáticos puedan ir a practicarla. Sin embargo, el masivo crecimiento que el movimiento Stunt viene teniendo abre una nueva posibilidad para que sus referentes sean escuchados por las autoridades de cada municipio.

Regulado y seguro

«Nuestra intención es poder hablar con el intendente o algún funcionario para que vea que esto está creciendo, que hay mucha gente que hace Stunt y viene a las caravanas y que es una muy buena oportunidad para ellos también», sostiene Origuela. «Queremos organizarlo para el bien de todos, que esté regulado, con la seguridad óptima, en corredores previamente pactados y sin poner en riesgo la vida de nadie», agrega.

Por último, Origuela explicó que las caravanas han tomado un carácter solidario en los últimos meses: «No es solamente salir a andar en moto lo que buscamos, intentamos hacer algunas movidas solidarias con escuelas y comedores por ejemplo. Ahora estamos viendo la posibilidad de incentivar la donación de sangre, entre otras propuestas que se están estudiando. Ojalá tengamos una buena respuesta de parte de las autoridades», concluye Origuela.

Entrevista a Gonzalo Origuela