Un breve repaso por la vida de quien diera nombre a la ciudad.
Un 25 de agosto, pero de 1892 fallecía José Clemente Berasategui (con ese), quien diera su apellido al actual distrito. “Bronquitis capilar”, se puede leer en el certificado médico de quien el día 26 fuera inhumado en el cementerio de Ezpeleta.
Berazategui (a partir de aquí con letra z) fue bautizado el 23 de noviembre de 1816 en la capilla de Las Conchas (Tigre). Aproximadamente en 1838 se radica en la actual zona del distrito, donde conocerá a Justa Rufina Fernández, viuda, con quien establece una relación que se mantuvo hasta su muerte.
José Clemente y Justa Rufina tuvieron 11 hijos: Ángela; Marceliana; Ubaldo; Felipe Severo; Domingo Valeriano; Paula del Carmen; Ana del Rosario; Mauricio; Rufino del Corazón de Jesús; José Julio y Donato.
En octubre de 1852 adquiere seis chacras a Doña Marta Márquez, viuda de Don Valentín Barragán. Casi 8 años después adquirirá otras dos chacras y, ya en 1870, la Provincia de Buenos Aires le adjudicará un terreno de 28 hectáreas de superficie.
El 31 de diciembre de 1872 queda inaugurado el servicio ferroviario hasta Ensenada, cuyas primeras estaciones son Bernal, Quilmes y Pereyra. Al año siguiente se inaugura la estación Berazategui, para lo cual José Clemente dona una superficie de tierras considerable.
Allí nacerá, por error, el nombre de Berazategui con z, cuando personal del ferrocarril colocara carteles con ese nombre. El tiempo deformará el apellido familiar que se mantendrá hasta nuestros días. Años después quedarán inauguradas la estaciones Conchitas (G.E.Hudson) y Godoy, posteriormente renombrada Plátanos.
En 1879 Berazategui es nombrado Presidente de la Municipalidad de Quilmes, renunciando a los pocos meses de asumir por una pelea con el Dr. Fermín Rodríguez, otro vecino de la zona. Posteriormente, en 1881-82 se desempeñó como como municipal (concejal).
Casi ochenta años después, el 4 de noviembre de 1960, el distrito logra su autonomía de Quilmes.