El anuncio de la Municipalidad de Quilmes sobre la construcción del Nuevo Parque Acuático, que se emplazará en el Museo del Transporte, ya generó controversia. Vecinos de la zona oeste y del distrito en general se mostraron en desacuerdo con la ubicación elegida y piden dar marcha atrás con la decisión.
El proyecto, que no fue consensuado con los vecinos y que sorprendió a todos porque fue informado el miércoles pero que ya se estaba construyendo (desde hace días que había máquinas en el predio removiendo el suelo), contempla un desembolso de casi 200 millones de pesos de las arcas municipales.
De acuerdo con el municipio, el nuevo Parque Acuático contará «con juegos, toboganes y aspersores aptos para todas las edades, junto a un núcleo de vestuarios, sanitarios y una sala de máquinas». Esta iniciativa «permitirá un uso más activo y beneficioso del este espacio, además de una mejora considerable del predio», indicaron.
En ese marco, los vecinos de la zona (el Museo del Transporte está ubicado en Laprida y Joaquín V. González) no desaprueban el Parque, pero sí su ubicación. «Este Museo fue construido luego de que los antiguos dueños de las tierras la cedieran con ese fin. Este parque, en primer lugar, viene a incumplir el deseo de quienes habitaron y cedieron el terreno», argumentaron en referencia a Carlos Hillner y Decoud (quién además de las tierras donó también carruajes antiguos de su pertenencia).
Juntan firmas
Ana María, una de las vecinas que desaprueba el Parque dentro del Museo, remarcó que «Ya estamos juntando firmas porque los que concurrimos al parque habitualmente no estamos de acuerdo; es un lugar tranquilo, destinado a proteger el Museo y no para este tipo de proyectos de una pileta, que seguramente es bueno tener una en Quilmes, pero no en este lugar».
En ese sentido, los vecinos aseguran que «Si bien dicen que van a mantener los árboles, que son muchos, eso es difícil de creer porque hay muchos ejemplares, es un lugar donde uno en verano se viene a proteger de tanto calor precisamente por su vegetación». Además, destacan que «nadie consultó a los vecinos si estábamos de acuerdo, empezaron a trabajar hace días y ahora lanzaron la noticia una vez iniciado los trabajos».
Por el contrario, desde el municipio explican que «el Parque Acuático contribuirá a una mejora sustancial en el predio, conservando la arboleda natural del espacio y potenciando la visita de vecinas y vecinos con esta nueva atracción deportiva, de recreación y esparcimiento, ideal como punto de encuentro e interacción para toda la familia.
Más reclamos de los vecinos
Además de ser desaprobado por los vecinos de la zona, en otras localidades se vieron preocupados por la erogación de dinero en un proyecto que consideran que «no es prioridad» para Quilmes.
«El municipio se cae a pedazos y la intendenta quiere gastar 200 millones de pesos en un parque acuático. ¿Por qué no compra más patrulleros o ponen médicos en las salitas? ¿Por qué no arreglan las cámaras de seguridad, que no funcionan y no sirven para nada?» agregaron.
«En Solano no tenemos agua, pero quieren gastar 200 millones en un parque acuático. Sólo en Quilmes pasan estas cosas», se quejaron.
Vecinos de Quilmes Oeste desaprueban el Parque Acuático:
