“Con un sopapo y un tiro en las piernas era suficiente”, afirmó Gabriela Cartagena, hermana de uno de los delincuentes que murió durante el tiroteo con el juez de Cámara de San Isidro y su custodio tras un intento de asalto en Quilmes. De acuerdo al testimonio de la mujer, su hermano “estaba perdido por las drogas” pero no por eso “había que matarlo como a un perro”.
El hecho ocurrió en las últimas horas a metros de la Municipalidad de Quilmes, cuando el camarista Ernesto García Maañón y su custodia fueron sorprendidos por un grupo de al menos siete delincuentes al salir de un polígono de tiro.
De acuerdo con las fuentes, la banda habría intentado robarles el auto en el que circulaban, y las víctimas se defendieron a los tiros. El resultado del fuego cruzado fue mortal: dos de los ladrones, ambos menores de edad, terminaron muertos.
Por el caso se inició una investigación por los delitos de “homicidio y lesiones”, aunque ni el juez ni su custodio fueron detenidos, ya que para la Justicia actuaron dentro de la legítima defensa. Esta hipótesis, sin embargo, fue rechazada por la familia de uno de los ladrones muertos.
“Mi hermano corrió, y tenía el tiro por la espalda”, sostuvo en diálogo con la prensa la hermana de Emanuel Cartagena, una de las víctimas fatales del violento episodio. Y remarcó: “Los pibes estaban en el piso y les seguían disparando”.
La mujer salió al cruce de quienes en las últimas horas se refirieron a su hermano como “una larva, o un rastrero”. “Mi hermano vivía perdido por la droga, yo nunca lo justifiqué”, apuntó Gabriela, y sostuvo que trató varias veces de internarlo o de que la policía interviniera, pero «nadie la ayudó».
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Por otro lado, se mostró desconfiada sobre la versión que involucra a su hermano en el presunto intento de robo al juez, por el que termina muerto. Y afirmó: “Dicen que querían robar el auto, yo no lo vi. Fue todo muy raro”.
En el mismo tiroteo en el que murió Cartagena, de 18 años, también falleció el adolescente Nicolás Ezequiel Martínez, alias “Pepo”, y resultó herido de gravedad el joven Cristian C., de 16. En tanto, otros cuatro integrantes del grupo escaparon del lugar y permanecen prófugos.
El arma Glock calibre 9 milímetros propiedad de García Maañón y una Bersa Thunder del mismo calibre del custodio del juez fueron secuestradas para su peritaje, al igual que un pistolón marca Rexio sin numeración que estaba en poder de uno de los delincuentes detenidos y el vehículo involucrado en el hecho.
El hecho quedó a cargo del fiscal Martín Conde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Quilmes, y por la participación del menor de edad intervine la fiscal María Julia Botasso, del fuero juvenil 2 del mismo Departamento Judicial.
🛑 Habló la hermana de uno de los delincuentes asesinados en Quilmes
🗣 "El custodio del juez me apuntó cuando me acerqué"
🗣 "Son pibes que están perdidos en las drogas"
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— América TV (@AmericaTV) July 3, 2023
