Florencio Varela: desafectaron a ocho policías que balearon a un oficial de la Ciudad

Ocho policías de la bonaerense que están siendo investigados desde diciembre del año pasado por haber baleado a un efectivo de la Policía de la Ciudad durante una persecución en Florencio Varela fueron desafectados de sus puestos por decisión de la Auditoría de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad de la provincia.

El padre de Fernando Gabriel Funes, de 31 años, perteneciente a la División Subterráneos de la Policía de la Ciudad, denunció que los efectivos implicados dispararon 23 balazos contra el auto de su hijo a pesar de que estaba desarmado. El hombre comparó el hecho con la persecución fatal de San Miguel del Monte, donde murieron cuatro jóvenes.

Los efectivos fueron desafectados en medio de la investigación que busca determinar si hubo exceso en los medios empleados y abuso de sus funciones durante el procedimiento del que derivaron las lesiones graves a Funes.

Sin embargo, los acusados continuaban hoy en libertad en una causa llevada adelante por la fiscal Mariana Dongiovanni, a cargo de de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada 2 de Florencio Varela.

«Al fin llega después de seis meses y dos días algo de Justicia para mi hijo», dijo el padre de la víctima. El hombre aseguró que, hasta el momento, el único imputado por ese hecho era su hijo. Contó que se le imputaba el delito de «resistencia a la autoridad».

Sin embargo, durante la investigación judicial quedó descartado que el efectivo haya estado armado. «Nos seguimos cruzando a esta gente que intentó matar a mi hijo y él recién ahora está soltando las muletas», aseguró Funes padre.

Según manifestó el hombre, el ataque a su hijo se generó por denuncias que éste había realizado contra su ex mujer y madre de su hijo, quien es miembro de la policía bonaerense.

El hecho

Todo ocurrió cerca de las 3 de la madrugada del 23 de diciembre de 2018. El oficial Funes regresaba a su casa a bordo de un Volkswagen Vento negro vestido de civil. Fuentes de la policía bonaerense dijeron que Funes pretendió evitar un control vehicular. Tras «una persecución» se originó un tiroteo que culminó con el efectivo herido.

Pero Funes padre negó esta versión. Dijo que su hijo «jamás se escapó de la policía y ni siquiera estaba armado». «Lo hicieron detener la marcha y comenzaron a dispararle. El auto recibió veintitrés impactos de bala. Cuando se bajó con las manos en alto, le dispararon cinco balazos más y dos impactaron en sus piernas. Herido y todo, se le acercaron y comenzaron a pegarle patadas», agregó.

Su hijo fue trasladado a un hospital de la zona donde quedó con custodia de efectivos de la bonaerense. «Siguieron intimidándolo y hasta le pusieron palos dentro de las heridas de bala que tenía en las piernas para torturarlo».

Por su parte, las fuentes policiales dijeron que si bien no se halló ninguna arma de fuego en poder de Funes ni en el lugar del hecho, se secuestraron vainas dentro del Vento.

La Policía inició actuaciones por «abuso de armas», pero como nunca apareció ninguna solo quedó imputado por «resistencia a la autoridad», aunque ante la medida de Asuntos Internos la causa podría ser recaratulada por la fiscal Dongiovanni.