La policía federal rastrilló el Parque Pereyra Iraola en el marco de una nueva búsqueda para dar con el paradero de Lucas Escalante, el joven de 26 años quien desapareció junto a Lautaro Morello el 9 de diciembre pasado.
De acuerdo a la información que brindó el fiscal Daniel Ichazo, titular de la UFI N°1 de Berazategui, los rastrillajes se hicieron en ese lugar debido a que siguen el rastreo del GPS del celular de Francisco Centurión, ex comisario mayor de la Bonaerense, quien es uno de los detenidos de la investigación.
Según indica el registro satelital, el ex director con enlace en la Interpol había recorrido la reserva días después de que los dos jóvenes de Florencio Varela fueran vistos por última vez, estando dicho predio en las cercanías de la ciudad, pero también de las zonas de La Plata y Berazategui.
Durante los operativos que se realizaron estuvieron trabajando la División de Homicidios de la PFA y expertos de la División Casos Especiales Oeste de la Superintendencia de Policía Científica, acompañados con perros entrenados para localizar cadáveres.
El resultado de este viernes fue negativo, debido a que no pudo encontrarse ningún tipo de elemento de interés para la causa, aún así continuara la búsqueda en el lugar, debido al gran tamaño del predio.
Marcha de familiares de Lucas Escalante
Familiares y amigos de Lucas Escalante, el joven desaparecido en diciembre pasado junto a su amigo Lautaro Morello, marcharon el miércoles frente al Juzgado de Garantías de Florencio Varela. Fue en repudio a la decisión de un magistrado de no otorgarle la prisión preventiva al comisario mayor Francisco Centurión por la presunta privación ilegal de la libertad del joven buscado, aunque sí por sustracción de caudales públicos.
Durante el día martes, el juez de Garantías 5 de Quilmes, Julián Busteros, dictó la prisión preventiva de Centurión. Sin embargo, contrariamente a lo que se esperaba, no lo no consideró responsable de la «privación ilegal de la libertad agravada por haber durado más de un mes (de Escalante) y por ser cometida con violencia» que le imputó el fiscal de la causa, Daniel Ichazo.
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Al respecto, Busteros señaló que las maniobras que la fiscalía le imputó al policía «se acercan más a la figura de encubrimiento que en la presente no resulta punible». Ello debido a que uno de los principales acusados es su hijo Cristian, actualmente preso junto a su primo sobrino Maximiliano.
A pesar de ello, el magistrado otorgó la prisión preventiva del comisario mayor por «sustracción de caudales públicos», por lo que continuará detenido.
En un escrito de 30 fojas, el fiscal Daniel Ichazo pidió al juez Busteros que revoque el punto de su resolución. Al mismo tiempo, adelantó que si le rechaza este planteo recurrirá a la Cámara de Apelaciones de Quilmes.
